
Caracas.- La increíble victoria del venezolano Sonny León cabalgando sobre Rich Strike en el Kentucky Derby se puede resumir en números: el caballo adquirido por la empresa Red Tr-racing en 30 000 dólares el año pasado, logró que su propietario, Rick Dawson, se embolsillara 1 millón 800 000 dólares por el triunfo, mientras los que apostaron a su favor se ganaron una pequeña fortuna, porque por cada dolar que arriesgaron, recibieron 163.60. Es decir, que si alguien apostó 10 dólares, se ganó 1.630 dólares. Pero sí apostó 100, se embolsilló 16 360, así de simple.
Historia que merece un buen guión porque, como contó el entrenador Eric Reed al medio especializado en carreras de caballos, Paulick Report, ganar el Derby de Kentucky con un jinete primerizo después de que, seis años atras, un incendio en uno de sus establos se llevó 23 caballos y todos sus arreos y equipos, es algo que ni siquiera Hollywood podría inventar. Y le gustaría que el protagonista fuese el actor Marc Whalberg, «porque es bajito, como yo».
Reed se sigue preguntando si fue real o un sueño, luego de que confesara que no pudo dormir la noche del triunfo y que no recuerda casi nada de lo que pasó cuando Rish Strike ganó:
“Cuando vi ese movimiento en el cuarto palo, le dije a mi papá (también entrenador) que eso podría ponernos en el tablero…después realmente no recuerdo lo que pasó, excepto que acabé en el suelo antes de que el caballo cruzara la meta. Todos mis amigos y familiares se amontonaron encima de mí».El propietario, Rick Dawson, es un empresario de petróleo semi-retirado que fue contactado a menos de 24 horas de ganar el Derby. Asegura que solo ha sido propietario de caballos desde hace pocos años y que Rich Strike es su único caballo activo. «Siempre me gustó ir a la pista, lo he estado haciendo durante 30-40 años. Hay una gran emoción en las carreras. Me gusta la desventaja, el estudio, la resolución de problemas en las apuestas. Pensé que era hora de tener un caballo. Fui a observar una venta de caballos y salí como dueño…Después de un tiempo me di cuenta de que si valía la pena tener un caballo, valía la pena tenerlo al 100%. Salí de las sociedades en las que estaba y me reenfoqué». Contrató a Eric y el resto es historia.
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