
Nada de lo humano me es ajeno, escribió Federico García Lorca, menos si se trata de una guerra. Por más distante que parezca, siempre nos afecta. Si no, vayan a la panadería y compruébenlo de inmediato. Subió el precio del pan y seguirá haciéndolo. Ucrania y Rusia proporcionan el 24% del suministro mundial de trigo, el 17% del de maíz, el 32% del de cebada y el 75% de las semillas de girasol con que se elabora aceite comestible.
Según un informe de las Naciones Unidas y su Programa Mundial de Alimentos (WFP), la pobreza, la crisis climática y la escasez de alimentos son la causa de que 820 millones de personan no tengan lo suficiente para alimentarse y 113 millones pasen hambre severa. Porque de eso se trata. Hambre pura y simple, luego de la revolución y sus políticas.
O, si no tienen tiempo para leer, con escuchar un par de minutos a la doctora Susana Rafalli pueden adentrarse en el infierno de la dificultad para conseguir comida y no poder dar de comer a los hijos.
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