
Por Omar Lugo en El Estímulo
Los resultados de las elecciones de alcaldes y gobernadores en Venezuela este 21 de noviembre eran esperados, pero igual resaltantes: el chavismo afianza su dominio sobre todas las instancias del país, pese a que según las encuestas es una minoría que ha perdido arrastre popular. Y esto, es parte de la nueva normalidad.
Candidatos chavistas ganaron en 20 de los 23 estados por un margen disputable en la mayoría de los casos. Pero el chavismo es una minoría regional y nacional, algo que han detectado las encuestas más respetadas desde hace tiempo.
En teoría, si la oposición hubiera logrado candidatos unitarios y sumar votos dispersos hubiera podido arrebatarle algunos enclaves estratégicos, como los estados Miranda y Lara, a los herederos del legado de Hugo Chávez.
Lee más en El Estímulo